REGISTRO DE VIZCACHAS EN EL SUR DE SANTA FE

REGISTRO DE VIZCACHAS (Lagostomus maximus)
EN PAMPA DE LAS LAGUNAS, SUR DE SANTA FE, ARGENTINA




Ignacio M. Barberis 1,2, Marcelo Romano 3, Eugenia Montani 4, Candelaria Cordini 1,5
y Enrique J. Derlindati 6
1 Facultad de Ciencias Agrarias, Universidad Nacional de Rosario, Campo Experimental Villarino,
C.C. 14, (2125) Zavalla, Santa Fe, Argentina.
2 Instituto de Investigaciones en Ciencias Agrarias, Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas.
3 Centro de Investigaciones en Biodiversidad y Ambiente (ECOSUR), Pje. Sunchales 329,
(2000) Rosario, Santa Fe, Argentina.
4 Museo Provincial de Ciencias Naturales “Dr. Ángel Gallardo”, San Lorenzo 1949, (2000) Rosario, Argentina.
Correo electrónico: euge_montani22@hotmail.com
5 Secretaría de Medio Ambiente, Ministerio de Aguas, Servicios Públicos y Medio Ambiente de la Provincia de Santa Fe,
Santa Fe, Argentina, Montevideo 970, (2000) Rosario.
6 Facultad de Ciencias Naturales, Universidad Nacional de Salta, Avda. Bolivia 5150, (4400) Salta, Argentina.


RESUMEN 
La vizcacha (Lagostomus maximus) (RODENTIA: CHINCHILLIDAE) es un roedor de hábitos nocturnos, que habita en colonias de varios individuos. Se considera que a principios del siglo XX sus poblaciones se habrían extinguido de la región pampeana del sur de Santa Fe. En un relevamiento reciente de la mastofauna del área conocida como ‘Pampa de las Lagunas’, detectamos la presencia de dos madrigueras activas. Realizamos una breve descripción de estas madrigueras, destacamos la importancia de su registro y planteamos la necesidad de revisar la legislación vigente para favorecer su conservación.




RESULTADOS
En enero de 2012, registramos por primera vez una vizcachera al sur de la localidad de Maggiolo, siendo relevada nuevamente en enero de 2015. La misma está ubicada en un antiguo médano que separa dos lagunas; los suelos son Hapludoles énticos, de textura ligeramente arenosa, con permeabilidad moderadamente rápida (Mosconi et al., 1981), lo cual favorece la actividad de las vizcachas. La vizcachera tiene aproximadamente unas 100 bocas de entrada y se extiende
por más de 230 m a lo largo del médano.
En octubre de 2014, en las cercanías de Christophersen visitamos una vizcachera ubicada en
una pequeña elevación entre una laguna y un bañado. Los suelos donde se ubica esta colonia son Hapludoles thapto nátricos con permeabilidad reducida (Mosconi et al., 1981). La escasa elevación del terreno y la cercanía a los cuerpos de agua hacen que la napa freática se encuentre muy cercana a la superficie. Debido a esto, la profundidad a la cual las vizcachas podrían excavar
no superaría los 80 cm. Esta vizcachera abarcaba una superficie de 9.571 m2 y presentaba más de 200 bocas. En ambas vizcacheras registramos fecas y huellas, señal de la actividad de estos animales, y colectamos cráneos y huesos que fueron ingresados a la colección del Museo Provincial de Ciencias Naturales “Dr. Ángel Gallardo”.



DISCUSIÓN Y CONCLUSIONES
Los entrevistados manifestaron que las poblaciones de vizcachas, otrora abundantes, comenzaron a desaparecer del área de estudio hace ya muchos años. El hallazgo de sólo dos colonias de vizcachas en toda el área estudiada confirma el marcado declinamiento de sus poblaciones en la región. Estas colonias están en peligro ya que se registró ‘in situ’ la presencia de trampas de lazo que habían sido emplazadas para su captura, las cuales fueron removidas durante el relevamiento. Además, de entrevistas con pobladores locales surge que las vizcachas no sólo son cazadas para consumo humano, sino también para alimentar perros domésticos (O. Martínez, com. pers.).
Dada la facilidad de movilización y reintroducción de poblaciones de esta especie (Ferreyra et al., 2007), cabría la posibilidad de que estas poblaciones hubiesen sido reintroducidas a partir de individuos traídos desde otras áreas. Al menos para el sitio VC, esta posibilidad sería muy baja dado que los pobladores locales manifiestan la existencia de la misma desde hace más de 60
años (O. Martínez, com. pers.). Si este no fuese el caso, entonces las mismas podrían considerarse poblaciones relictuales; no obstante, para dilucidar este aspecto habría que realizar estudios genéticos de las poblaciones. Consideramos que la reducción poblacional e incluso su desaparición de algunas áreas del sur de Santa Fe se debería a la combinación de varios factores. Por un lado, la intensificación de las actividades agrícolas condujo a la utilización de todos los sectores de tierra alta disponibles, sin dejar lugar para las especies de fauna que utilizaban esos ambientes. Esta fragmentación y reducción poblacional hace que hoy sean muy sensibles a cambios catastróficos del ambiente (e.g. inundaciones). Por otro lado, lo apreciado de su carne (escabeches y conservas)
y de su cuero hace que sea cazada activamente en toda su área de distribución (Jackson et al., 1996; Gómez Villafañe  un recurso alimenticio importante para las comunidades locales más empobrecidas (Ferreyra et al., 2007). Finalmente, al igual que en otras ecorregiones, es perseguida por ser considerada plaga de la agricultura, por competir con el ganado y por arruinar los campos con sus madrigueras, sin conocer la verdadera incidencia de estos roedores sobre las actividades agrícolas (Bonti et al., 1999; Chebez, 2009; Pereira y Quintana, 2009). En este sentido, estudios controlados han demostrado que la incidencia de daño de la vizcacha sobre cultivos (soja) es menor y estaría condicionado a la extensión y ubicación del lote (Navarro et al., 1997). Por ende, si comparamos los costos y beneficios de erradicar este roedor versus los de su uso sustentable, consideramos que este último es una alternativa para la resolución de conflictos en el manejo de la especie.
Desde hace muchos años esta especie ha sido decretada Plaga Nacional de la Agricultura (Ley Nacional Nº 4.863- Art. 2º, en el año 1905; Llanos y Crespo, 1952). Esta situación legal a nivel nacional se mantiene hasta la fecha, y más aún, diversas provincias tienen planes oficiales de lucha para su control (Bruggers y Zaccagnini, 1994). En Santa Fe, fue considerada plaga provincial por
Ley Nº 4.390/54, derogada en 2008 por la Ley Nº 12.923 (no reglamentada). Por esto, actualmente la vizcacha no puede ser cazada en el territorio provincial ya que no es considerada una plaga. Dada la situación poblacional de esta especie consideramos que debería trabajarse en la legislación a nivel nacional, ya que de continuar la caza como método de control probablemente continúen las extinciones locales, lo cual podría conducir a la extinción generalizada.
La importancia de estos nuevos registros radica en que cualquier nuevo hallazgo de una especie considerada extinta a nivel local no sólo aumenta la diversidad del área, paisaje y región, si no que se recuperan tramas funcionales que aportan a la integralidad del sistema (e.g. complejización de redes tróficas). Esto cobra mayor importancia en el caso de la vizcacha que es considerada una especie ingeniera del ecosistema (Branch et al., 1999; Chebez, 2009). A su vez, estos nuevos registros constituyen, una oportunidad para la revisión de legislación ya obsoleta y fuera de contexto.
Por último consideramos que debería trabajarse en pro de la conservación de estas vizcacheras, así como en el relevamiento de otros posibles sitios y en la resolución de los potenciales conflictos con las actividades productivas.





Paraje La Costa del Salado, departamento San Cristóbal. Una historia repetida






Este Paraje se encuentra en el cruce de la ruta provincial Nº 13, con el río Salado, en la provincia de Santa Fe.   Allí hay un enorme humedal formado por desbordes a lo largo del río Salado, con bañados, abundante vegetación acuática y  praderas inundadas, que tiene unos 10 km de ancho y es atravesado por la ruta Nº 13.
Es un sitio de importancia para poblaciones y nidificación de aves acuáticas. Por ejemplo, en una recorrida reciente por la ruta, pudimos contar mas de 7000 aves acuáticas, entre garzas, flamencos, gallaretas,  cigüeñas, patos, cuervillos, etc.  También se destaca la abundancia del doradito pardo (Pseudocolopteryx dinelliana), que es una especie casi  amenazada a nivel global (para ver el listado de aves de ese día, ver link abajo).
A pesar de que se encuentra alejado de ciudades y hay que transitar muchos kilómetros por tierra para llegar, es un lugar muy visitado por cazadores furtivos y pescadores.
Aquí se practica caza furtiva intensiva. No solo matan patos, sino todo tipo de aves acuáticas.
En las banquinas de la ruta,  pueden encontrarse  miles de cartuchos y se han convertido en cementerios de aves. Una cosa es la caza "deportiva" que no será analizada aquí y otra es la caza furtiva y el tiro al blanco de aves que no tienen interés gastronómico.
 
Cabe recordar que  ley de caza  de la Secretaría de Medio Ambiente de la provincia de Santa Fe, permite cazar en el territorio, las siguientes especies silvestres:
1. PATO CRESTON (Netta peposaca)
2. PATO SIRIRI COMUN (Dendrocygna bicolor)
3. PATO SIRIRI PAMPA (Dendrocygna viduata)
4. PERDIZ CHICA COMUN (Nothura maculosa)
5. PALOMA TORCAZA (Zenaida auriculata)
6. COTORRA (Myiopsitta monacha)
7. MORAJU o NEGRUCHO (Molothrus bonariensis)
8. VARILLERO o CONGO (Agelaius ruficapillus)
9. LIEBRE (Lepus europaeus)
 
En el caso de los patos, la temporada es del 2 de mayo al 2 agosto de 2015 y se pueden abatir como máximo: PATO CRESTON diez (10) piezas,PATO SIRIRI COMUN diez (10) piezas y PATO
SIRIRI PAMPA cinco (5) piezas, con un máximo de doce (12) piezas en total en la
sumatoria de las tres especies por cazador y en transporte, por excursión.
 
La caza furtiva no es ninguna novedad en la zona  (Advierten sobre la matanza de aves en la costa del río Salado, diario El Litoral 29-1-2009///http://www.ellitoral.com/index.php/diarios/2009/01/29/regionales/REGI-01.html), pero parece que nada a cambiado. 
Además los miles de cartuchos,  la basura tirada y los cadáveres dispersos de cientos de aves, estarían causando contaminación ambiental. 
Otro tema son los cotos de caza que funcionan en la zona.
Hay guardafaunas que con gran esfuerzo deben realizar cientos de kilómetros para  organizar meritorios operativos. Eso es importante, pero se precisaría mayor compromiso desde otros ámbitos para combatir el problema.


 
Para ver el listado de aves del sitio
 
 
Para ver fotos, videos y voces de aves del Paraje La Costa





Fotos aves: Horacio Luna
 
Sooty Tyrannulet (Serpophaga nigricans)
Piojito gris
 
Dinelli's Doradito (Pseudocolopteryx dinelliana)
Doradito pardo
 
Pied-billed Grebe (Podilymbus podiceps)
Macá pico grueso
 
Black-crowned Night-heron (Nycticorax nycticorax)
                   Garza bruja
 
Fotos de Martín Manassero
 
 
 Los juncales son abundantes 

 
Praderas inundadas 
 
 
 
Cementerios de aves 
 
 
Peces  tirados en el camino
 
 
 
 
Canal hacia el Salado
 
 
 Restos de espátula rosada



Río Salado desbordado 
 
 

 
 
 
 

 
 
 
Espartillares de Bajos Submeridionales, al norte de los bañados



Casi 400 mil hectáreas menos de bosque



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UNIVERSIDAD › ENTRE 1976 Y 2008 SE REDUJO LA SUPERFICIE DE BOSQUE DE CUñA BOSCOSA SANTAFESINA.


Casi 400 mil hectáreas menos de bosque

Un estudio de la UNR mostró el alto porcentaje de superficie de bosques que se pierde con la deforestación anualmente. Consecuencias de una práctica que se intensificó con el paso de los años. Desde las compañías forestales al daño actual.

Los investigadores José Vesprini, Claudia Alzugaray e Ignacio Barberis, realizaron el estudio.


 Por Silvana Di Stefano*
Estudios realizados desde la Universidad Nacional de Rosario (UNR) demostraron que desde 1976 al 2008 la superficie de bosque de Cuña Boscosa santafesina se redujo de 790.529 a 404.672 hectáreas, alcanzando entre 2005 y 2008 una tasa de deforestación anual de 19.574 hectáreas; es decir, una superficie mayor a la ciudad de Rosario, de 17.800 hectáreas, por año. La zona abarca la porción más austral del Chaco Oriental, desde Gobernador Crespo hacia el norte ocupa porciones de los departamentos San Javier, San Justo, San Cristóbal, Vera y General Obligado. "El uso del bosque santafesino tiene inicios hacia finales del 1800 y la intensificación del uso ocurre posteriormente en la primer parte del siglo XX. Uno de los emprendimientos de mayor impacto fue sin duda el establecimiento de las compañías forestales que explotaban el quebracho colorado para la producción de taninos", detallaron José Vesprini, Claudia Alzugaray e Ignacio Barberis, investigadores de la Facultad de Ciencias Agrarias.
No obstante, los especialistas de la UNR precisaron que "a pesar que la historia señala a estas intervenciones como las de mayor impacto en la pérdida de masa boscosa, eventos más recientes, y que siguen funcionando, indican que tal vez la historia de uso y destrucción de nuestros bosques no se encuentre ubicada en un pasado muy remoto".
Para los investigadores, la deforestación no consiste solamente en eliminar árboles, sino que se eliminan todos los organismos que crecen dentro del bosque y así muchas de las interacciones que existen entre ellos. "Los bosques son ecosistemas complejos donde gran parte del alto número de los seres vivos que en ellos habitan interactúan. La eliminación de cualquiera de ellos afecta el modo en el que circula la materia o fluye la energía dentro de los ecosistemas", precisaron.
"Estamos acostumbrados a observar paisajes agrícolas que se ubican inicialmente en la parte sur de nuestra provincia y forman parte de la llamada llanura pampeana, que es muy productiva. El paisaje original de pastizales permitió la rápida y fácil transformación en los paisajes actuales: cultivos agrícolas con muy pocas especies vegetales (soja, trigo y maíz) y la eliminación de casi todos los animales en los que la actividad humana está basada en un gran aporte de energía contenida en combustibles, químicos y maquinarias", agregaron.
También se encuentran en la provincia de Santa Fe los ecosistemas de bosque que son muy distintos a los ecosistemas agrícolas y albergan una gran diversidad de especies vegetales, animales, hongos, bacterias y otros organismos pequeños: "La única fuente de energía a partir de la cual funcionan es el sol. No son ecosistemas subsidiados con energía externa, por lo cual si bien no tienen una alta productividad por unidad de superficie son altamente eficientes en el uso de la energía. Las poblaciones humanas asociadas a estos ecosistemas son muy reducidas en tamaño, no conforman grandes ciudades, no exportan grandes cantidades de materia ni son grandes productores de basura".
Los investigadores acentuaron lo negativo que tiene la pérdida de superficie boscosa ya que "implica que la dinámica de la materia y energía se verá muy afectada. Transformar bosques en pastizales o cultivos significa que no toda el agua que podría retener el bosque puede ser retenida en ecosistemas de pastizal o cultivos". Una de las consecuencias visibles, remarcó Vesprini y su equipo, es que "el agua no retenida escurre cuenca abajo encontrando en muchos casos a las ciudades donde la población humana se halla muy concentrada".
Sin embargo, las consecuencias desfavorables pueden llegar a ser peores. A modo de ejemplo, indicaron que "gran parte del carbono presente en un bosque se encuentra inmovilizado como materia viva o muerta y poca cantidad forma mineral. Los bosques capturan dióxido de carbono, la eliminación de bosque significa alterar el modo en el que cicla el carbono; es decir, se vuelve más disponible en la forma más oxidada que es el dióxido de carbono. Los cultivos y pastizales también retienen una cantidad de carbono y agua. Pero debido principalmente a su escasa biomasa, es decir materia orgánica acumulada, y la vida más corta de sus organismos, la materia cicla de un modo más veloz".
Los investigadores analizaron la actualidad de la situación y subrayaron: "El modelo y sistema económico actual exige crecimiento y desarrollo y pareciera que esta concepción del mundo moderno se ha establecido en nuestro pensamiento y no podemos imaginar alternativas". Asimismo, reflexionaron: "Una de las estrategias tecnológicas modernas para el mantenimiento del incremento de la productividad sigue siendo la misma que llevó al hombre Europeo a `descubrir` América: la expansión de la frontera productiva. Esta lógica implica imponer al paisaje chaqueño la forma y dinámica del paisaje pampeano, proceso que llamamos pampeanización".
"Los estados imponemos en los ecosistemas las actividades necesarias para mantener vigente nuestro modelo económico. Los ecosistemas responden frecuentemente con una plasticidad que resulta sorprendente. Pero hay situaciones en la historia donde los ecosistemas no pueden responder a las modificaciones impuestas del modo en que lo deseamos. Es que algunas de las `leyes que rigen la naturaleza` son inexorables", concluyeron los especialistas de la UNR.
*Integrante de la Dirección de Comunicación de la Ciencia-UNR

Lagunas de Campo Andino, departamento La Capital

El flamenco rosado halló un hábitat en Santa Fe y hay que preservarlo

 Noticia publicada por diario La Capital http://www.lacapital.com.ar/la-region/El-flamenco-rosado-hallo-un-habitat-en-Santa-Fe-y-hay-que-preservarlo-20150726-0002.html

Las lagunas saladas de Campo Andino reciben cada vez más ejemplares de esta bellísima especie. Uno de los patrimonios más importantes que piden proteger el espacio legalmente.



Aquerenciados. Por alguna razón, el flamenco buscó al norte de la ciudad de Santa Fe un refugio. Cada vez son más, y se calcula que superan los 4 mil.


Una cosa es contarlo y otra es ver y disfrutar de lo que ocurre al norte de Santa Fe, en un lugar que pocos conocen y valoran como uno de los patrimonios naturales más importantes de la provincia y que urge proteger legalmente. Son tres lagunas de agua salada agrupadas en campos privados y en las que habitan miles de flamencos rosados australes, que por alguna razón eligen cada vez más este lugar para invernar y partir luego a la zona precordillerana, para reproducirse y nidificar. Por la historia del lugar, los proteccionistas que bregan por su seguridad lo han bautizado “Añapiré” (piel del diablo), tal como como lo llamaban los conquistadores.
   “Hace cuatro o cinco años había a lo sumo cien flamencos en estas lagunas. Ahora son muchos más y ya estamos acostumbrados a verlos”, comenta Néstor Moser, presidente comunal de Campo Andino, una población del departamento La Capital de poco más de 500 habitantes, que ya tiene incorporado como parte del paisaje a esa movediza línea rosada en el horizonte, conformada por más de 4 mil phoenicopterus chilensis, nombre científico de esta bellísima especie de aves acuáticas.
  
Fuertes procedimientos. Tanto para el titular de la comisión comunal como para el jefe del destacamento policial local, Ariel Ibáñez, la proliferación exponencial de los ejemplares “tal vez tenga que ver con que hubo procedimientos muy grandes de caza (prohibida en todos sus tipos en el departamento La Capital), porque había una depredación total, disparaban a todo lo que se moviera. Para darse una idea, en el último operativo se juntaron y descartaron varias bolsas grandes con cartuchos. Entonces se corrió la voz de que acá se controla y los cazadores casi ya no vienen”.
   Esta tranquilidad y el hecho de no sentirse amenazados por los estallidos de los disparos podrían ser algunas razones por las que estas preciosas aves eligen ir a “engordar” entre abril y septiembre-octubre a Campo Andino, comiendo los pequeños microorganismos llamados “artemias salinas”, que pululan por estas aguas de escasa profundidad y que les otorgan esa particular coloración.
  
Su hábitat. Los phoenicopterus chilensis nidifican en Argentina, Bolivia, Chile, Paraguay y Perú, mientras que en Uruguay y el sur de Brasil sólo es un migrador no reproductivo. Es vagante en Ecuador y en las Islas Malvinas. En Santa Fe se los puede ver en las lagunas El Bonete, Cueva del Tigre, y El Palmar, declaradas como áreas protegidas en el departamento Vera, en el norte provincial, y al sur se encuentran en la laguna Melincué.
   “Lo que vuelve único y digno de proteger al fenómeno natural que está ocurriendo con la fauna silvestre en Campo Andino es la densidad y variedad de especies que se produce en un espacio reducido teniendo en cuenta que, de las tres lagunas en cuestión, la más grande tiene sólo dos hectáreas y media, detalla el guardafauna honorario Sebastián Lovera, quien además se desempeña como inspector de Caza y Pesca del área de Ecología del Ministerio de la Producción.
   Junto a su familia, este custodio es el primero y el principal impulsor de la idea de otorgar un resguardo a este lugar. A su causa se han sumado otros amantes y defensores de la naturaleza, como el guardafauna Juan Martín Mastropaolo, con quien encabeza la lucha por interesar a las autoridades y a la ciudadanía para poner en valor y resguardo a Añapiré.
Como si supieran. “El lugar es fabuloso, cada vez vienen más flamencos, como si supieran que los estamos cuidando. Al principio, siempre había cazadores”, cuenta Mastropaolo a La Capital. Lo dice mientras exhibe fotografías de aves acuáticas (coscorovas) masacradas allí mismo. “Añapiré tiene ese aire de misterio que pocos sitios tienen. Uno escucha cuentos de otras épocas y retrocede para imaginar cómo era esa zona hace 300 o 400 años, cuando era muy habitada por comunidades aborígenes. Cementerios y vasijas de barro dejan testimonio de esa época de esplendor que extinguió la llegada del hombre blanco”, se lamenta el cuidador.
   “Aquí no sólo es espectacular la cantidad de flamencos rosados sino de otras especies de aves como gallareta, macá, tero real, garza moras y blanca, bandurria, coscoroba, gaviota y tres tipos de patos: capuchino, cucharón y crestón. También hay M’biguá, cisne blanco y de cuello negro, Tachurí (siete colores) y abecasina, entre otras”, rescata Lovera.
Relevamiento. Todas esas especies fueron constatadas y contabilizadas recientemente en un censo neotropical de aves acuáticas impulsado por Wetlands International y Aves Argentinas del que participaron miembros del Club de Observadores de Aves COA Sirindá, del que Lovera y Mastropaolo son miembros.
   “En Santa Fe se relevaron tres lugares, y Añapiré fue uno. En total se identificaron aquí 83 especies de aves, de las cuales 34 son acuáticas, entre ellas los flamencos rosados, que se calculó que serían unos 4 mil, aunque estimamos que por lo menos debe haber mil más en estas lagunas”, remarcó el guardafauna.
   Poco a poco se suman voluntades para que este sitio, su flora y su fauna, reciban protección legal. Un grupo de ciudadanos y organizaciones proteccionistas remitirán próximamente un petitorio al gobierno provincial para solicitar este resguardo, y se espera el respaldo de algún legislador que se comprometa y apadrine la iniciativa mediante algún proyecto de ley que impida la depredación en este patrimonio natural invaluable.

Area natural protegida Villa Gobernador Gálvez

Bonfatti decretó que Villa G. Gálvez tenga un área natural protegida

 Noticia publicada por Diario La Capital, http://www.lacapital.com.ar/la-region/Bonfatti-decreto-que-Villa-G.-Galvez-tenga-un-area-natural-protegida-20150720-0093.html

Ad referéndum. Será la primera del departamento Rosario, además de la tercera del sur provincial. Una historia de más de una veintena de años de gestiones.



El abrazo hace unos meses de vecinos y ambientalistas que se resisten a la destruccion del predio.




En una curiosa situación, el gobernador de la provincia, Antonio Bonfatti, firmó —ad referéndum de las cámaras legislativas—, un decreto que establece la condición de "área natural protegida" para una zona de Villa Gobernador Gálvez, aunque el mayor impulso a la medida no provino de los ediles villagalvenses sino de sus pares del Concejo rosarino.
Así, el primer mandatario santafesino avaló el decreto por el que el se propone que el curso de agua del arroyo Saladillo —límite natural entre las ciudades de Rosario y Villa Gobernador Gálvez—, sea incorporado al Sistema Provincial de Areas Naturales Protegidas, en una medida que se haría extensiva también a la cuenca de los arroyos Sauce-Pavón, más al sur, una medida que nació de la concejala rosarina Daniela León.
Integrantes de diversas entidades ambientalistas y sectores políticos y sociales de la vecina ciudad de Villa Gobernador Gálvez reclaman desde hace mucho tiempo la protección de un extenso predio de aproximadamente 22 hectáreas que son parte de las casi 125 del Parque Regional Sur y en el que había ingresado con maquinaria vial para apurar el desmonte de seis hectáreas que el Sindicato de la Carne pensaba convertir en un camping privado. En la zona también se preveía la construcción de una cancha de golf y de una guardería náutica.
 
Continuidad. La continuidad del ambiente natural por encima de las jurisdicciones fue uno de los argumentos de la concejala rosarina Daniela León, quien con el acompañamiento del Legislativo rosarino terminó pidiendo al Ejecutivo provincial que adoptara una medida.
Cabe recordar que ya en 1995 el Concejo de Villa Gobernador Gálvez estableció la condición de área protegida municipal para la zona, algo que en el 2014 el mismo cuerpo casi deja de lado.
León fundamentó, en su monento, su proyecto señalando: "Estamos ante una situación que corresponde resolver con participación de distintos organismos estatales, porque Rosario y su región constituyen un espacio con diferentes municipios, pero donde el ambiente natural y las actividades humanas tienen absoluta continuidad".
El aval del gobernador Bonfatti refuerza la posición de los vecinos del barrio La Isleta, cercano a los terrenos, quienes se movilizaron desde siempre en defensa del lugar.
Este sitio, además del citado sindicato, está desde hace varios años en la mira de algunos emprendedores inmobiliarios. Precisamente, la propuesta sindical para el uso en comodato por 15 años del sector ingresó al Concejo villagalvense a mediados de marzo pasado.
En los considerandos del decreto de Bonfatti se define a las áreas naturales protegidas según la letra de la ley provincial 12.175, la que las circunscribe "a todo ambiente o territorio que, manteniendo su aspecto original sin alteraciones importantes provocadas por la actividad humana, esté sujeta a un manejo especial legalmente establecido y destinado a cumplir objetivos de conservación, protección y presentación de su flora fauna, paisaje y demás componentes bióticos y abióticos de sus ecosistemas".
La superficie protegida se constituiría, además del cauce propiamente dicho, con 100 metros de tierras a cada lado del arroyo y el área se extendería desde las nacientes del cauce, en el denominado "bajo de Los Leones, hasta su desembocadura en el Paraná".
Para los no advertidos, esas tierras tan cercanas a las ciudades se asemejan a amplios baldíos poblados de malezas, pero desde las áreas provinciales de protección de la flora y la fauna se ha establecido que el codiciado lugar constituye la única manifestación en estado puro del bosque nativo pampeano en el sur santafesino, caracterizado por la baja altura de los ejemplares, y un alto valor ecológico y cultural ya que también es sitio arqueológico en el que se han hallado fósiles y también alfarería de los pueblos originarios. El sitio es hábitat de zorros, tortugas, cuises y unas 60 variedades de aves, además de una abundante flora.

Resistencia. Los vecinos que defienden la reserva ejercieron diversas formas de resistencia. El pasado abril, ante la aceptación de la propuesta del Sindicato de la Carne por parte del Ejecutivo, se convocaron ante la sede del cuerpo para presionar a los ediles, quienes retiraron el tema del orden del día de la sesión ante la repercusión mediática y la reacción de vecinos e instituciones locales.
Otras medidas adoptadas por los vecinos es la que llevaron a cabo hace unos meses con un abrazo simbólico al predio. Los mismos vecinos junto a militantes ambientalistas organizaron además varias jornadas de limpieza del lugar, ayer hicieron otra.

La primera en el Gran Rosario
En el país hay 381 reservas naturales y áreas protegidas. De estas, 15 están en la provincia de Santa Fe, el 3,93 por ciento de áreas protegidas de la Argentina. Sólo dos (una en departamento General López y otra en Constitución) de esos 15 espacios están en el sur provincial, y ninguna está emplazada en el departamento Rosario. La reserva de Villa G. Gálvez sería la primera del departamento en ingresar al sistema provincial de “Areas Naturales Protegidas”, y es el último bosque nativo del sur provincial.

Parque Regional Sur, Villa Gobernador Gálvez







El Parque Regional, Reserva Ecológica, se encuentra ubicado entre la avenida de circunvalación y el Aº Saladillo, en la localidad de Villa Gobernador Galvez, departamento Rosario, Santa Fe.  Es una reserva creada por la ordenanza Nº 1093/05, Area protegida categoría 1, decreto Nº 0042/2009-Al.
Presenta  un interesante relicto de bosquecillos, con una superficie de unas 120 ha. de superficie, compuestos por cina-cinas (Parkinsonia aculeata), aromos (Acacia caven), talas (Celtis sp.) y algunos algarrobos dispersos (Prosopis sp.), entre otras leñosas, asociados a pastizales. Se han detectado unas 100 especies de aves. Fue incluida en el APCA ROO2, Cañada del Arroyo Saladillo.
Sería importante garantizar la protección a largo plazo de este sitio, ya que es unos de los últimos y escasos reservorios de flora y fauna del sur provincial. En la actualidad existen problemas que amenazan la reserva (ver http://www.lacapital.com.ar/la-region/Denuncian-desmonte-en-Villa-G.-Galvez-para-una-cancha-de-golf-20150531-0024.html)

 
 Fotos de la reserva de M. Manassero













Cartel Reserva Ecológica, Parque Regional Sur













eBird

Resultado de imagen para e bird

Invitamos a subir listados de aves realizados en Santa Fe, a este sitio: http://ebird.org/content/argentina/
Al 28 de marzo de 2015, ya se han subido 188 listas y el número sigue creciendo rápidamente. 

 

Haciendo listas de aves con eBird


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La gran mayoría de los observadores de aves hacemos listas de aves. Es decir, recopilamos nuestras observaciones cada vez que salimos al campo. Las más completas incluyen la totalidad de las especies registradas e incluso pueden estar comentadas con detalles acerca de la abundancia, uso de hábitat, nidificación, etc. Esas listas son nuestra historia como observadores y quizás el tesoro más preciado que tenemos, ya que hablan de nuestras experiencias en el campo y de lo que hemos aprendido con el tiempo. Podemos tener listas de una localidad que visitamos a menudo, listas del jardín de nuestra casa, listas de un súper viaje a selvas remotas, y también (porque no) la lista de las aves que vimos en toda nuestra vida. Ahora bien, más allá del volumen que tenga esa información, la mayoría de nosotros no es consciente del inmenso valor que tiene ese cúmulo de datos para la ciencia básica, la conservación y para otros observadores ansiosos de repetir nuestros hallazgos. Es así que las libretas suelen estar durmiendo en oscuros cajones.
¡Pero no todo está perdido! El objetivo de este artículo es presentar en sociedad una herramienta de internet donde podemos volcar nuestras listas diarias y observaciones casuales, para que estén al alcance de todos y puedan ser consultadas en cualquier momento. Se trata del portal eBird (www.ebird.org), una idea desarrollada en el Laboratorio de Ornitología de Cornell cuyo espíritu pretende derribar barreras internacionales y animar a la gente salir al campo a observar aves. Está especialmente diseñada para observadores y “listeros” que gustan compartir sus observaciones con otros.
Además de estar ayudando directamente a entender aspectos como distribución y abundancia de las aves, con este sistema el usuario podrá ordenar y visualizar sus propias listas como nunca antes imaginó. Y no sólo esto. Es también posible apreciar en un prolijo y detallado mapa todas las localidades que visitamos y buscar fácilmente las especies que queremos ver. A medida que empezamos a subir nuestras listas nos daremos cuenta de algo muy importante: el usar eBird nos obliga a cambiar de conducta y ser más exigentes con nosotros mismos.
¿De qué manera? Generando listas más completas y criteriosas, determinando con precisión que especies vimos en el campo y cuántos individuos de cada una de ellas. Esto, en definitiva, nos hace mejores observadores de aves. Y no importa si vimos especies raras o nuestra lista es muy pobre, todas las observaciones importan, ya que este sistema se nutre de grandes volúmenes de información diaria y no tanto de observaciones puntuales.
Para aquellos recelosos de su información, existe la opción de que esta no quede disponible al gran público; sin embargo, con más personas en el campo y más observadores compartiendo sus observaciones: ¿no será hora de entregarse a este masivo dar y recibir información sin reservas?
¿No tiene aún su cuenta de eBird? Visite www.ebird.org/content/argentina y luego complete su usuario y contraseña. En unos pocos instantes será un feliz usuario de este sistema.
Con una gran cantidad de datos de calidad podemos tener una idea clara sobre cuestiones básicas como por ejemplo: ¿donde pasan el invierno las tijeretas que crían en Argentina?, ¿cuál es la distribución real del cuclillo chico en Buenos Aires? o ¿en que momento se ven las bandadas más grandes de playeros rojizos en Puna Rasa?, entre muchas más. Los resultados revelarán en el mapa patrones de distribución más precisos y nuevos lugares que seguramente merezcan ser reconocidos como AICAs. La gran diferencia con otras páginas similares reside en que la información va directamente hacia el Sistema Nacional de Datos Biológicos y que es una herramienta usada por miles de usuarios de todo el mundo con el fin de integrar esa información en forma global.
Los aspectos prácticos del uso del sistema no es objeto de esta introducción, pero diremos que solamente se necesitan 3 simples pasos para cargar una lista. Los datos básicos que no deben faltar son: fecha, localidad, tiempo que pasamos viendo aves y (si es necesario) la distancia aproximada recorrida. El portal ebird funciona únicamente con la “lista del día por localidad”. Por lo cual debemos ser bien precisos y tener en claro los lugares visitados si hacemos un largo viaje. Ademas es importante hacer una todos los días por más que estemos explorando un sitio durante una semana.
Queda entonces hecha la invitación una vez más a salir al campo y registrar todo lo que vemos, pero esta vez con un nuevo salto de calidad: ingresar nuestros datos y experiencias al cibermundo para que éstas ayuden a entender y conservar las aves.

Diego Monteleone y Nacho Areta. Nota publicada en Revista Nº 58, Año 2013.

Crean el Centro de Humedales Jaaukanigás

Es el primero en su tipo en el país / www.proteger.org.ar         

Crean el Centro de Humedales Jaaukanigás
integrando la red internacional WLI


• La flamante iniciativa –que cuenta con el auspicio de la Municipalidad de Villa Ocampo–, tendrá su sede en  la histórica ex Estancia San Vicente, disponiendo de un salón auditorio apto para  reuniones y talleres, biblioteca, alojamientos, restaurante y cafetería. Posteriormente se incorporarán instalaciones para la observación de aves y fauna silvestre –adelantaron.
•PROTEGER y El Portal del Humedal, de Villa Ocampo, provincia de Santa Fe, anunciaron la creación del Centro de Humedales Jaaukanigás (CHJ) –el primero en su tipo en la Argentina–, que trabajará integrado a la Red Internacional de Humedales (Wetland Link International – WLI), a la Red de Centros de Humedales LAC –Latinoamérica y el Caribe,  y a las propuestas del Centro Regional Ramsar para el Hemisferio Occidental (CREHO).
•“El CHJ busca estimular a visitantes nacionales y extranjeros a lograr una mayor conciencia sobre los valores de los humedales, mediante actividades educativas y de contacto con la naturaleza, así como el conocimiento de la diversidad biológica y cultural de los humedales del Paraná medio, especialmente del Sitio Ramsar Jaaukanigás” –destacaron. (Datos de contacto al final de esta nota).

El Centro de Humedales Jaaukanigás tiene su sede en el histórico paraje San Vicente, en el corazón del Sitio Ramsar. Fotos Proteger y El Portal
El Centro de Humedales Jaaukanigás tiene su sede en el histórico paraje San Vicente, en el corazón del Sitio Ramsar. Fotos Proteger y El Portal

Villa Ocampo, Santa Fe, 5 diciembre 2014.- La Fundación PROTEGER y la Cooperativa Portal del Humedal, de Villa Ocampo, provincia de Santa Fe, anunciaron la creación del Centro de Humedales Jaaukanigás (CHJ) –el primero en su tipo en la Argentina–, que trabajará integrado a la Red Internacional de Humedales (Wetland Link International – WLI) y  a la Red de Centros de Humedales LAC –Latinoamérica y el Caribe.
La flamante iniciativa –que cuenta con el auspicio de la Municipalidad de Villa Ocampo–, tendrá su sede en  la histórica ex Estancia San Vicente recientemente restaurada, disponiendo de un salón auditorio apto para  reuniones y talleres, biblioteca, alojamientos, restaurante y cafetería. Posteriormente se incorporarán instalaciones para la observación de aves y fauna silvestre –adelantaron los promotores del centro.
“El CHJ busca estimular a visitantes nacionales y extranjeros a lograr una mayor conciencia sobre los valores de los humedales, y los estilos de vida sostenibles, mediante actividades educativas y de contacto con la naturaleza, así como el conocimiento de la diversidad biológica y cultural de los humedales del Paraná medio, especialmente del Sitio Ramsar Jaaukanigás, en beneficio del ecosistema y de las comunidades ribereñas” –señaló Román Murzyla, flamante coordinador ejecutivo del CHJ y miembro de la Cooperativa Portal del Humedal Ltda.
“El ecoturismo con una fuerte impronta educativa será una de nuestras principales herramientas. La inauguración formal del centro coincidirá con la 2da. Fiesta Nacional de los Humedales, en Villa Ocampo el 2 de febrero 2015, Día Mundial de los Humedales –adelantó Murzyla.
“La idea de crear el centro estaba ‘in mente’ hace tiempo, pero la decisión de implementarlo parte de una invitación de la Red Internacional de Humedales (Wetland Link International – WLI), que vincula centros de humedales en todo el mundo. La reciente “Conferencia Internacional sobre Conservación de Humedales en Latinoamérica y el Caribe”, de la que participamos en Pica, Chile, terminó de concretar nuestra incorporación a la red” –indicó por su parte Jorge Cappato, uno de los promotores del centro. (Datos de contacto al final de esta nota).
“Nuestra relación con la Convención Ramsar, con sede en Gland, Suiza, desde los ’90 es un aporte fundamental y, desde luego, el centro tendrá como referencia los lineamientos del Programa de CECoP (Comunicación, Educación y Concienciación Pública) de Ramsar. También esperamos generar una fuerte línea de capacitaciones con expertos del país y del exterior, articulando con el Centro Regional Ramsar para el Hemisferio Occidental (CREHO), con base en la Ciudad del Saber, Panamá” –añadió.
Wetland Link International (WLI), Red Internacional de Humedales, es una red de centros de apoyo para la protección de los humedales que ofrecen actividades educativas en su sitio. WLI está dirigida por el Wildfowl and Wetland Trust y cuenta con miembros en los seis continentes.
En el corazón del Sitio Ramsar
“El Centro de Humedales Jaaukanigás (CHJ) se encuentra en un punto clave del Sitio Ramsar Jaaukanigás, de 492.000 hectáreas –en la planicie aluvial del río Paraná al norte de la provincia de Santa Fe–, conformadas por humedales e islas fluviales que albergan una biodiversidad entre las mayores de Argentina y de Sudamérica. Tiene entre sus valores destacados el de estar conectado con el Sitio Ramsar Humedales Chaco, de 508.000 hectáreas formando juntos un excepcional corredor”, destacó Julieta Peteán, del programa Agua y Humedales de PROTEGER.
“Islas, bosques, arroyos y lagunas cercanos al brazo principal del río y conectados con éste, forman un laberinto de increíble complejidad y diversidad de hasta 40 kilómetros de ancho, y un verdadero corredor biológico de humedales de más del mil kilómetros de largo desde el Alto Paraná hasta el Delta. Además, si consideramos que el Sitio recibe aportes hídricos y biológicos del río Paraguay y del Pantanal, podemos hablar de un corredor de 2 mil kilómetros libres de represas, un caso excepcional hoy en el mundo. De hecho en Jaaukanigás se encuentran especies de linaje amazónico, subtropical, chaqueño y paranaense que ingresan al Sitio a través de los ríos de la cuenca” –resaltó.
“En medio de los enormes árboles de la selva “en galería” del Sitio Ramsar que vuelcan sus ramas sobre los arroyos se encuentran colonias de carayá o mono aullador, dos especies de yacarés (cocodrilos), carpinchos (capibaras), algunos de los últimos ciervos de los pantanos, más de 300 especies de aves y 220 de peces. Precisamente la pesca artesanal constituye un signo distintivo del sitio; las comunidades de pescadores representan un legado cultural inigualable que debe ser protegido. Muchos de ellos son descendientes de los antiguos Jaaukanigás, “Gente del Agua” en la lengua de los abipones, el pueblo indígena originario de esta región” –explicó Peteán.

El imponente paisaje alberga una biodiversidad entre las más altas de Argentina y Sudamérica, con especies amazónicas, chaqueñas y paranaenses.
El imponente paisaje alberga una biodiversidad entre las más altas de Argentina y Sudamérica, con especies amazónicas, chaqueñas y paranaenses.

Instalaciones y actividades
“El Portal del Humedal, la cooperativa que administrará el flamante Centro de Humedales Jaaukanigás en coordinación con PROTEGER, está integrada por los herederos del lugar histórico de San Vicente, en la costa oeste del Paraná, junto a pescadores artesanales y habitantes ribereños. Las instalaciones pertenecen al casco antiguo de la Estancia, impecablemente restaurado y ampliado.
“Era  la casa del dueño de la que fue una de las primeras y más grandes curtiembres del país. Su chimenea ya no echa humo, pero sigue en pie como mudo testimonio de aquella época tan particular de finales de 1800. Su rico pasado, que aún estamos rescatando, está enlazado al de los “pueblos forestales” del norte santafesino y a la historia del tanino y del quebracho, que marcó a fuego al fin del siglo XIX e inicios del XX en la región” –puntualizó Román Murzyla.
“Esta es una de las razones por las que el visitante del Centro de Humedales podrá enriquecerse con una propuesta de ecoturismo de fuerte contacto con la naturaleza, pero también con una herencia cultural e histórica singulares” –agrega.
Las instalaciones con que iniciará sus actividades el Centro de Humedales Jaaukanigás (CHJ), incluyen un salón auditorio apto además para talleres y reuniones, biblioteca, alojamientos para visitantes, expertos y voluntarios, restaurante y cafetería. Está previsto además contar con un sitio acondicionado para la observación de aves y fauna silvestre. En cuanto al equipamiento, cañón de video, pantalla, y mesas de trabajo fue aportado por ambas instituciones. Prismáticos, salvavidas y embarcaciones equipadas para la navegación en los arroyos isleños, son otros elementos  con que cuenta el centro –pormenoriza.
“Senderismo, cabalgatas guiadas y safaris fotográficos a través de los maravillosos paisajes de las islas fluviales con su rica biodiversidad de monos, aves y muchas otras especies; canotaje, kayakismo y navegaciones en los arroyos que atraviesan  la selva en galería que por momentos parece el Amazonas. Precisamente, este río es el segundo más grande de Sudamérica después del Amazonas. Es por eso que los viajeros experimentados han llamado al Paraná “el Amazonas de clima templado. El lugar, donde la atención es familiar, es también un sitio ideal para temporadas de distensión y descanso” –comenta Murzyla.

Objetivos
Según el acuerdo que acaban de firmar la Cooperativa Portal del Humedal y PROTEGER, “Serán objetivos del Centro de Humedales Jaaukanigás (CHJ), estimular a los visitantes a conectarse con la naturaleza y lograr una mayor concienciación acerca de las funciones y valores de los humedales, y los estilos de vida sostenibles. Promover, particularmente a través del ecoturismo, el conocimiento de la diversidad biológica y cultural de los humedales del Paraná medio en general y del Sitio Ramsar Jaaukanigás en especial, incluyendo el legado de las comunidades ribereñas.
“Desarrollar actividades de comunicación, educación y participación para la conservación de la integridad ecológica y de los bienes y servicios de los humedales como irremplazable soporte de la calidad de vida humana. Rescatar y sistematizar el conocimiento tradicional y ancestral local y regional para el uso sostenible de la biodiversidad, así como compilar el conocimiento científico disperso sobre los humedales del litoral fluvial.
“Coordinar iniciativas en y con las comunidades y gobiernos locales vinculadas a la protección y difusión del patrimonio natural, histórico y cultural regional. Impulsar proyectos de conservación, restauración y uso público de los humedales. Apoyar actividades de intercambio cultural y voluntariado que enriquezcan la experiencia de los habitantes locales y de los visitantes de otras partes del país y del mundo.
“Constituirse en referencia nacional e internacional, y foro de encuentro y de capacitación, sobre la gestión de zonas húmedas, cambio climático, tecnología apropiada, rescate de saberes ancestrales, ecoturismo y otras temáticas que hacen al desarrollo sostenible con equidad. En este sentido el CHJ integrará la Red WLI (Wetland Link International/ Red Internacional de Humedales), como uno de sus centros asociados y con su auspicio, y la Red de Centros de Humedales LAC –Latinoamérica y el Caribe” –finaliza el acuerdo.
PROTEGER viene trabajando hace más de una década en los sitios Ramsar Jaaukanigás y Humedales Chaco, a través de diferentes iniciativas de conservación entre ellas las que se llevan adelante con apoyo de la Alianza de Ecosistemas, una coalición integrada por Wetlands International, Both Ends y el Comité Holandés de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN).


Centro Humedales Jaaukanigás, San Vicente, Villa Ocampo – datos de contacto:
Latitud: -28.5012 Longitud: -59.2645
• Contacto para visitantes:
Román Murzyla: (Aktiviere JavaScript, um die Email-Adresse zu sehen) romanmurzyla@hotmail.com –celular (móvil) 03482 155 82576 –desde el exterior (54) 93482 582576
Mabel Restovich: 03482 155 82653 –desde el exterior (54) 93482 582653
• Comunicaciones y prensa:
Jorge Cappato: www.facebook.com/jorge.cappato –celular (móvil) 0342 154 484293 –desde el exterior (54) 9342 4484293
Fuente: Prensa/Proteger, reproducción libre citando www.proteger.org.ar
Links y notas relacionados:
Red Internacional de Humedales / Wetland Link International – WLI: http://wli.wwt.org.uk/es
Centro Regional Ramsar para el Hemisferio Occidental (CREHO) – Panamá: http://www.creho.org
Ecoturismo Argentina –emprendimientos comunitarios, familiares y de enfoque cultural: http://www.ecoturismoargentina.com
Convención Ramsar –Programa de CECoP: http://www.ramsar.org/es/actividad/el-programa-de-cecop-de-ramsar
Conferencia Internacional sobre Conservación de Humedales en Latinoamérica y el Caribe: http://www.proteger.org.ar/en-pica-chile-debatieron-sobre-humedales-de-america-latina-y-el-caribe
Día Mundial de los Humedales 2015: http://www.proteger.org.ar/dia-mundial-de-los-humedales-2015
Libro “Humedales fluviales de América del Sur.Hacia un manejo sustentable”: http://www.proteger.org.ar/libro-humedales-fluviales-america-del-sur